Corriendo para triunfar, huyendo de la inseguridad.

Me pregunto a veces, si valdra la pena el riesgo que corro durante mis carreras largas?

Cuando salgo y dejo solos a mis hijos, dormidos, y me voy por las calles a alcanzar una meta.

Cuando ando sola por avenidas, veredas, caminos y atajos tan susceptible a la inseguridad que estamos viviendo cada dia.

Hoy desperte muy optimista. Me tocaron 12 kms. La proxima semana es la carrera de la radio, 10 kms, asi que creo me va a ir muy bien. He estado confiada ultimamente, ya que he recuperado el sueño y aunque solo son 6 o 7 hrs por noche, para mi es la gloria. Esto se refleja notablemente en la calidad de mi entrenamiento. Pero, no puedo pasarme la vida corriendo en la caminadora porque a la hora de salir a las calles me voy peleando con el viento, huyendo del sol y de perros rabiosos. Lo disfruto al maximo, pero despues de semanas encerrada, que papel tan pobre voy y hago en una carrera si no tengo la pericia necesaria para esquivar un hoyo. Claramente es muy necesario entrenar en el ambiente real.

La semana pasada, sali a reencontrarme con los 10 kms callejeros . Ya harta de correr en mi colonia, especialmente pequeña, recorri las avenidas que rodean a esta. Este es el mismo recorrido de la ya tradicional Carrera de la amistad. Sali por una brecha conocida por sus grandes hoteles en contra esquina de El Parque central. Vuelta a la derecha. Tome la mas grande avenida de Juarez, Paseo Triunfo de la Republica, hasta llegar a Ave. Ejercito Nacional. Estas dos son por lo regular muy traficadas, pero en domingo a las 7:00 a.m. solo unos cuantos autos se ven por ahi. Pasando por Home depot, Waltmart y Cinemark se respira cierta seguridad. Luego viene una parte dificil: despues de un Motel empieza un gran terreno en el cual solo hay unos cuantos equinos. Si algo inesperado sucediera por ese lugar, pues ni para donde encontrar un refugio, al menos que pudiera volar. Al llegar a el semaforo se puede observar el amplio terreno que esta en la esquina de enfrente, el cual por años lucio muchisimas cruces muy grandes de color negro, recordando los cuerpos de mujeres encontrados ahi. Todo eso quedo en el pasado, mas al pasar por ahi me fue inevitable recordar aquellos hechos. Esta area, ahora esta inundada de nuevos hoteles y restaurantes ya que el consulado ha cambiado sus instalaciones a este lugar. Vuelta a la derecha. Pasando por el consulado, hoteles en obra negra, centros de negocios y un centro comercial muy grande y concurrido, obviamente vacio por la hora. Vuelta a la derecha. Otra zona dificil. El recorrido es largo y muy solo. A mi izquierda se encuentra una acequia que alguna vez llevo agua. A mi derecha, locales comerciales sin ningun negocio resultado de la buenisima economia que estamos teniendo. Esta avenida parecio la mas eterna pues no podia dejar de mirar a la derecha, a la izquiera, a mis espaldas. La mano derecha se me entumio. Mi puño no podia estar mas apretado y rigido. Ahi traigo un gas lacrimogeno que me da una poca de seguridad, que analizando bien, no me serviria de nada en una emergencia. Al fin llegue otra vez a la Triunfo, veo el parque central de nuevo y el trafico ya es mas abundante. Vuelta a la derecha. Esta el Hotel. Termina el Hotel. Vuelta a la derecha. Entro en mi colonia otra vez. Esas calles que ya son tan aburridas me dan un respiro otra vez. Estoy a salvo. Termino los 10 Kms. en el ultimo parque, o es el primero, depende de por donde entres.

Ya de regreso a mi casita, despues de estirar me doy cuenta que todavia es "temprano" ya que los niños siguen dormidos. Y a salvo. Me acuesto con ropa seca dispuesta a dormir un poco mas, cuando me detengo y observo a mi bebe, tan dormido, tan inocente, tan indefenso. Me ahogo en la idea de que seria de ellos, si algo me pasara en la calle y ellos no supieran donde esta la mama, por que no llega a casa.

El lunes en la mañana salio una nota en el periodico: Encuentran a una mujer tirada entre Ave. Triunfo y Ave. de la raza. La investigacion en proceso.

Paso otra semana laaaaarga en la caminadora, esto es normal porque cuando se incrementan los kms. cuatro paredes se reducen a un espacio de 2x2.

Ayer, sabado le pedi a una vecina que se fuera a mi casa a las 6:40 a.m. para que me cuidara a los lepes e irme mas tranquila. Hoy sali por la Ejercito y fui dando las vueltas hacia la izquiera, mismo recorrido lado contrario. Sobre la triunfo iba dando mis pasitos, cuando de frente vi como una Grand Cherokee verde pino bajaba su velocidad. Eran dos hombres, uno manejando y otro sentado en el asiento de atras. Es bastante extraño que no fueran los dos sentados en la parte de enfrente, no? Su mirada fue muy distinta a la ya habitual de los viejos. Por lo regular miran a uno con cara de sed y dicen tarugadas riendose. Pero hoy fue distinto, me miraron como si estuvieran enojados conmigo. Como si les hubiera hecho yo algo. Bajaron mas la velocidad. Y gracias a que hoy estaba estrenando mis lentes de contacto, pude grabarme sus caras y expresiones en mi cabeza como si fueran un personaje de pelicula que ya he visto tantas mil veces. Yo no baje mi rostro. Los mire de la misma manera, casi retandolos, a travez de mis lentes obscuros. Este ego que me cargo, me hace facil no mostrar debilidad ante los hombres "malos". Arma de dos filos. Pararon totalmente y senti que ya era mi hora. Las piernas se me hicieron hilos. Los tenis eran de piedra. Mis codos no podian desdoblarse. Se que olian mi miedo. Esa sensacion me hacia imposible notar que venia mi salvacion. Un camion de pasajeros se paro a unos 50 mts. y bajaron mas o menos 6 personas entre hombres y mujeres. La camioneta verde pino arranco de nuevo. Pude respirar, pero todavia no se como segui corriendo. Me sentia muy muy debil, como resfriada. Queria llorar. Entre a la colonia por el Hotel, y no hice ni una cuarta parte de lo planeado. Continue como 20 min mas en el fraccionamiento, pero cada vez tenia el paso mas lento. Pare a los 4.5 kms. y camine otros 20 min para relajarme un poco. Regrese muy desilucionada. Di gracias a mi sorprendida vecina. Me fui a recostar, mas no me pude dormir. Vi a mis hijos dormidos y me pregunte: Vale la pena?

Ya he agotado otras alternativas. No crean que es lo unico que he tratado para alcanzar mis metas. Las personas que me conocen ya me han dado 101 sugerencias, pero como esta la situacion en este momento, pues se me acaban los ases bajo la manga, el plan B, el plan C.

Hoy en la noche me trepare otra vez a la caminadora, tengo que terminar mis 12 de hoy, aunque sea de esta manera tan monotona. Por mi seguridad.